El Muro de Hierro

 

Yo no crucé la frontera, la frontera me cruzó a mi... Quien dijo estas palabras, tenía razón. Las ciudades fronterizas siempre tienen sus dolores. Además, cuando la frontera es con un país de los sueños. Sueños que se rompen al llegar a esa construcción horrible que atraviesa toda la ciudad y se va mas allá... Pa Mexicali. Y de allá mas allá... Todo el país.

La garita es como un colador - unos pasan, otros no. Algunos regresan en el autobús de las 3 de la madrugada. Este autobús es un monstruo que te lleva solamente de ida. No hay regreso. Algunos ¨pasajeros¨ ni español saben... Se concentran todos allá. Esperando...

Recuerdo, leí un libro sobre una mujer cucapá. Creo que se llamaba Sabina. Sabina se fue a recoger algunas hierbas. Caminaba lejos, el viaje era algo tardado. Sabina nunca regresó con sus familiares. En camino de vuelta un monstruo de hierro le cerró el paso. Sabina se quedó en México para siempre...

El muro que rompe corazones. TBC